Nuestro entusiasmo con el béisbol.


Como si fuese una tradición, muchos venezolanos advierten que el año agoniza cuando inicia la temporada de béisbol profesional. A pesar de que la ronda eliminatoria se extiende por casi tres meses, para los fanáticos más apasionados, el torneo local es un asunto de semanas. Para otros no tan fanáticos, el verdadero campeonato inicia en enero, en tanto para los seguidores de los equipos eliminados, o aquellos que no se identifican con el béisbol, cualquiera que resulte el campeón les da igual pero no le es indiferente ya que en la calle siempre se comenta todo lo que sucede en la final. Pero lo que sí resulta innegable es que el béisbol en Venezuela, más que un deporte, es un estilo de vida ligado a las células más emotivas de los venezolanos. Y parte de esa identidad es la que ha visto emerger grandes figuras. Como una muestra representativa se pudiese nombrar a peloteros como Luis Aparicio, David Concepción, Antonio Armas, Andrés Galarraga, Omar Vizquel, Wilson Álvarez, Bob Abreu, Johan Santana, Miguel Cabrera, Félix Hernández, Aníbal Sánchez y Pablo Sandoval que han sido reconocidos por sus hazañas.

Nuestra liga de Béisbol Profesional Venezolana, hasta ahora conformada por ocho equipos, regala emociones durante el tiempo que dura. Forma parte de nuestra cultura, y este apego trasciende como una chispa contagiosa que día a día nos entusiasma más. A medida que el campeonato avanza, nos comprometemos más con esta fiesta. Esperando siempre que nuestro equipo nos dé la gloria del campeonato.   


Autor: Humberto Gutiérrez