El ejercicio físico como arriesgada perturbación


La etapa de la adolescencia constituye la fase crítica en todo ser humano ya que se intenta encontrar y reafirmar una identidad, de allí que los modelos a imitar resulten significativos tanto para el adolescente como para los responsables de su formación. Los más jóvenes, al no contar con un sólido criterio para diferenciar lo natural de lo artificial, o lo real de lo fantástico, suelen ser los principales consumidores de todo aquello que le ofrecen las más sagaces industrias publicitarias. 

Un caso específico, y preocupante, es cuando el adolescente se obsesiona con poseer un cuerpo similar al de algún superhéroe animado, personaje de video juego o figura  virtual, porque tales ideales de belleza y poderío suelen provocar frustraciones cuando, tras interminables y abusivas sesiones de entrenamiento físico, resultan inalcanzables.  Negar la evidencia de que ahora los muchachos desean ser más fuertes de forma instantánea; o que las muchachas estén pensando en implantes, sin culminar su natural proceso de desarrollo; es intentar ignorar una realidad que abofetea.

Ante este panorama, se debe estar atento al comportamiento del adolescente ya que, por lo regular, es proclive al fanatismo. De allí que emular, como sea, a personajes ficticios, de cuerpos irreales  puede representar un peligro físico y emocional.


Autor: Humberto Gutiérrez